Lunes Santo

Hoy por la tarde nos trasladaremos hasta la Catedral de Lima, para ver salir la procesión del Señor Cautivo de Trinitarias. De nuestra hermosa Catedral saldrán cuatro andas: el Señor en la Oración del Huerto, el Señor de la Caña, el Señor Cautivo de Trinitarias y la Virgen del Mayor Dolor.

Esta procesión es organizada por la Hermandad del Señor Cautivo de Trinitarias y por la comunidad de monjas trinitarias, que desde principios del siglo XX ha desarrollado la devoción a esta imagen pasionaria.

Sale en primer lugar el anda del Señor en la Oración del Huerto, la imagen es una hermosa muestra de la imagenerìa colonial y representa a Jesús en la escena de Su oración y agonía en el Huerto de los Olivos; se lo representa de rodillas, con la mirada hacia lo alto y las manos en actitud de súplica hacia el Padre. Usualmente se lo viste con túnica verde y el escapulario trinitario azulgrana en el pecho, lleva resplandor con potencias de plata y va sobre una peana antigua rojo lacre con perfiles dorados. Generalmente los jarrones esquineros van adornados con ramas de olivos en asociación a esta escena, aunque este paso ganaría mucho si se lo decora en la parte posterior con olivos en tronco, a manera de un “bosque de olivos”.

La segunda anda pertenece al Señor de la Caña, esta hermosa y antigua talla la vemos desde hace algunos años el Domingo de Ramos cuando viene desde su templo San Miguel Arcángel de Trinitarias. Es una imagen que representa Nuestro Señor erguido y en su rostro muestra una infinita expresión de dolor. El escultor ha hecho gala de sus conocimientos anatómicos por la perfección de la escultura y le ha impreso ese realismo que solo lo sabían lograr los imagineros de antaño.

Sigue el anda del Señor Cautivo de Trinitarias, imagen de tamaño casi natural que representa al Señor Jesús presentado al pueblo, es decir que responde a la iconografía de los Ecce Homo, conocidos como “cautivos” por la piedad popular peruana. Se lo representa de pie y de manera frontal en una actitud muy hierática, maniatado y coronado de espinas, suele ir vestido con túnicas bordadas de tela roja o púrpura con el escapulario trinitario (cruz griega de vertical rojo y travesaño azul en campo blanco) sobre el pecho. Un resplandor con potencias ricamente labrado en plata y una gran peluca de cabellos naturales completan el aseo de la imagen. El anda propiamente dicha es del tipo usual para los Cristos de Lima, un arco con resplandores soportados por columnas salomónicas, jardinera en los flancos y cuatro ángeles tenantes en las esquinas, todo enchapado en plata labrada de estilo neobarroco. Esta anda tiene la peculiaridad de que el arco no es de medio punto sino de herradura de perfil carpanel.

La última anda es la de Nuestra Señora del Mayor Dolor, imagen de vestir de muy hermosa expresión. Dirige la mirada hacia arriba y a la izquierda, como mirando un crucifijo, por lo que es de suponer que originalmente perteneció a un calvario, la mano derecha sostiene un paño de lágrimas mientras que la izquierda se eleva en actitud de plegaria. La imagen va vestida con saya y manto, siempre muy adecuadamente por los expertos “Vestidores” con los que cuenta nuestra Semana Santa de Lima. Complementan el vestuario de esta imagen un corazón con siete puñales labrado en plata y una corona imperial con resplandor en metal feble. La imagen es portada en un anda barroca de madera tallada y dorada, donde destaca la peana que podría ser talla antigua.